- 29 marzo, 2024
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- Categoría: Artículos


ESCRITO POR:
Mg. Monica Alvarado – Secretaria Académica de la Escuela de Ingeniería Civil FCEIyA UNR
Mg. María Laura Pagani – Directora del Instituto de Estudios de Transporte FCEIyA UNR
Mg. Andrea Magnani – Instituto de Estudios de Transporte FCEIyA UNR
Candela Ciribeni – Instituto de Estudios de Transporte FCEIyA UNR
La problemática de la seguridad vial a nivel global se plasma en las cifras que publica las Naciones Unidas, basadas en investigaciones propias, donde se afirma que “las colisiones en las vías de tránsito causan casi 1,3 millones de defunciones prevenibles y se estima que 50 millones de traumatismos cada año, lo que los convierte en la principal causa de mortalidad de niños y jóvenes en todo el mundo”.
Las proyecciones que formula ese organismo internacional muestran que la tendencia se mantendrá a lo largo de los próximos 10 años, mostrando mayores impactos en los países con ingresos medios y bajos.
En función de estas cifras tan alarmantes, muchos países pusieron en agenda las cuestiones relacionadas a la seguridad vial suscribiendo, entre otras acciones, compromisos alineados a lo establecido por la resolución 74/299 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, que perfila un Plan de Seguridad Vial para la década 2021-2030 cuyo objetivo principal es “reducir las defunciones y traumatismos causados por el tránsito en al menos un 50% durante todo el período de referencia.”
En este marco, el Plan define una serie de medidas que deberían adoptar los gobiernos nacionales, provinciales y locales para alcanzar los preceptos establecidos, instando a la formulación de políticas públicas específicas y la diagramación de lineamientos y planes con distintos alcances territoriales, priorizando un enfoque integrado de sistemas de seguridad como herramienta impulsora del desarrollo sostenible.
En una línea similar, los Objetivos de Desarrollo Sostenible plantean diversas acciones que se deben garantizar para promover el bienestar de las personas en todas las edades: la meta original era reducir a la mitad el número de muertes y lesiones causadas por accidentes de tráfico en el mundo para el año 2020. Para lograr el objetivo de ciudades y asentamientos humanos más inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles, la meta para el 2030 es de “proporcionar acceso a sistemas de transporte seguros, asequibles, accesibles y sostenibles para todos y mejorar la seguridad vial, en particular mediante la ampliación del transporte público, prestando especial atención a las necesidades de las personas en situación vulnerable, las mujeres, los niños, las personas con discapacidad y las personas de edad”.
De todas estas iniciativas, toma suma relevancia el paradigma de “Visión Cero”, como un nuevo enfoque de carácter sistémico, que aborda a la seguridad vial en forma integral, partiendo de la idea que los siniestros viales ocurren por errores humanos y que la pérdida de una vida es moralmente inaceptable. El foco deberá ubicarse, entonces, en generar acciones para un comportamiento seguro teniendo en cuenta los elementos necesarios para ello: planificación, diseño, construcción y operación de un espacio público, bajo una responsabilidad compartida entre Estado y actores privados que deben estar integradas, teniendo en cuenta la sostenibilidad ambiental, social, económica, de salud pública y calidad de vida, para lograr reducir el número de víctimas de siniestros viales.
Como punto de partida en la construcción de políticas públicas de seguridad vial, se puede identificar la necesidad de establecer un escenario base, riguroso y representativo, del ámbito territorial bajo análisis, focalizando en las escalas urbanas por concentrar mayores niveles de siniestralidad.
En Argentina coexisten varios organismos oficiales que recaban datos y generan información de base para abordar esta problemática, lo que implica, en muchos casos, reportes de valores distintos. Esta diversidad de organismos que registran siniestros viales y víctimas asociadas, persiguen objetivos distintos y, por ende, utilizan metodologías de recolección y consolidación de bases de datos diferentes.
La ciudad de Rosario no escapa de esta situación, donde se evidencia la parcialidad de la información sobre siniestros viales que imposibilitan la determinación de un plan de acción concreto a partir de la determinación de un escenario base.
En este marco, surge la inquietud desde la UNR de formular un espacio que sirva de base para consolidar información de siniestros ocurridos y formular propuestas de políticas públicas basadas en un enfoque integral. De esta idea, nace el Observatorio de Seguridad Vial -OSV- para la ciudad de Rosario, como herramienta para la determinación de un diagnóstico local, que permita analizar los distintos componentes del sistema de movilidad que hacen a la seguridad vial y que sirva de espacio de consulta permanente de actores públicos y privados y como generador de propuestas de acciones concretas.
El Observatorio tiene como objetivo la recopilación, análisis e interpretación de datos relevantes para el conocimiento de la situación existente, sus deficiencias y sus fortalezas, que colaboren en la formulación de acciones estratégicas. De esta manera, tiene su foco puesto en la consolidación de información de seguridad vial a nivel local, para la conformación de un sistema de indicadores claves y la producción y difusión de información sistemática de seguridad vial de la ciudad. En base a esto, su accionar está basado en acuerdos de colaboración con actores claves que produzcan datos y/o tengan interés directo con la temática de seguridad vial.

Actualmente, el OSV estableció un vínculo con el Concejo Municipal de la ciudad de Rosario, a través de un convenio de colaboración, cuyo objetivo principal es participar en una mesa intersectorial, con un enfoque interseccional, aportando un diagnóstico de la seguridad vial de la ciudad y brindando posibles líneas de acción para políticas públicas. El trabajo está focalizado en el procesamiento de información disponible de siniestros y personas fallecidas y heridas para identificar patrones de conducta y situaciones específicas para generar propuestas concretas.
Plan Mundial. Decenio de acción para la seguridad vial 2021-2030. Organización Mundial de la Salud. Comisiones Regionales de las Naciones Unidas.
Objetivo 11 de Desarrollo Sostenible. Ciudades y Comunidades Sostenibles. Agenda para el Desarrollo sostenible. ONU. https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/cities/
http://visioncero.org.ar/
Autor: https://www.pasajero7.com/rol-la-academia-impulso-la-movilidad-sostenible-segura/